Sr,
Sra, ¡no sea indiferente!, ¡se mata a las mujeres en la cara de la
gente!
En
8 semanas 10 mujeres asesinadas.
Feministas
en Alerta otra vez en la calle, no daremos tregua a la violencia
machista que mata a las mujeres.
En
este fin de semana se han producido dos feminicidios en contexto de
violencia de género en el hogar.
En
Montevideo, una mujer internada por traumatismo
encéfalo craneano grave
terminó siendo la 9º víctima de la violencia machista en lo que va
de año. En esta ocasión el centro de salud dónde fue atendida la
víctima supo desenmascarar la agresión mortal disfrazada de
“accidente”.
En
Río Branco, fue asesinada por su esposo una mujer de 86 años. 10ª
víctima.
En
Melo, exigimos la
aparición de Karina Sousa Martínez de 36 años que está
desaparecida desde hace más de dos meses. Que su búsqueda no se
detenga, que su caso no se archive. Las mujeres no desaparecemos, nos
secuestran o nos matan.
Nos
preguntamos cuantas mujeres sufrirán “accidentes”, mortales o
no, que pasarán desapercibidos, que serán desconocidos o ignorados
por su entorno o las instituciones del Estado que intervienen.
¿Cuántas llegan al suicidio inducidas por la situación de
violencia que viven? ¿Cuántas de las mujeres desaparecidas han sido
asesinadas y sus cuerpos no se han encontrado?
Es
doloroso realizar este registro pero también imprescindible para que
todas y todos tomemos conciencia de la dimensión alarmante de esta
lacra que vulnera reiteradamente los derechos más básicos de las
mujeres, el derecho a vivir, el derecho a la libertad, el derecho a
vivir una vida libre de violencia.
Cada
feminicidio íntimo es el desenlace irreversible de una historia de
violencia, de reiteradas agresiones psicológicas, sexuales,
patrimoniales y físicas. No es un hecho aislado, repentino, hay
antecedentes, señales, la prevención es posible. ¡BASTA DE
VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES!
Cada
feminicidio tiene un autor con nombres y apellidos pero también pone
de manifiesto nuestra cultura machista que legitima la dominación de
las mujeres, que nos discrimina, cosifica y no acepta un NO por
respuesta. Los agresores no son enfermos o desviados son HIJOS SANOS
DEL PATRIARCADO.
Cada
feminicidio pone en evidencia la ausencia del Estado en su
responsabilidad
de prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres.
A
las mujeres se nos mata por ser mujeres en una sociedad patriarcal
con un Estado patriarcal que sigue mirando para otro lado ante la
existencia de una desigualdad entre mujeres y varones que vulnera
nuestros derechos cada día.
Basta
de silencio, de omisiones, basta de culpabilizar a las mujeres, basta
de doble moral, hipocresía, de mirar para otro lado, basta de tratar
los casos como hechos aislados, patológicos.
Exigimos
que la violación constante de los derechos del 52% de la población
ocupe el lugar que merece en las prioridades del Estado, en la agenda
política y campañas electorales. Queremos propuestas y respuestas
urgentes para las mujeres.
Exigimos
al Estado medidas concretas, recursos, alternativas reales para
salir de la espiral violenta, legislación que aborde y responda de forma
integral y específica a la violencia machista en la casa y en la calle.
salir de la espiral violenta, legislación que aborde y responda de forma
integral y específica a la violencia machista en la casa y en la calle.
¡NI
UNA MUJER MENOS! ¡NI UNA MUERTA MÁS!
QUEREMOS UNA VIDA LIBRE DE VIOLENCIAS MACHISTAS.
QUEREMOS UNA VIDA LIBRE DE VIOLENCIAS MACHISTAS.
SI TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS
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